miércoles, 27 de enero de 2010

El puto karma, joder.

… y al abrirme la puerta quiero esfumarme. ¡Estás tan guapa con ese abrigo! con ese abrigo que me cuenta en secreto que debajo de él están tus pezones, tu ombligo… que me cuenta que lo has usado para taparte pero en realidad sigues desnuda, porque estás desnuda por mucho abrigo que te pongas. Ese es el problema. Eres tan bella. Me abres la puerta sorprendida, porque no te he llamado, pero necesito mis llaves para poder entrar en mi casa y coger mi maleta. Mi, mi, mi, mi… estos días he decidido cambiar el “mi” por el “nuestro”; pero joder, me olvidé de decírtelo.

Lo primero que he hecho al despertarme es preguntarle la edad:
-18 y medio.
-y medio!?
Joder. Las putas 10 de la mañana. Le digo que me voy, que me esperan para coger mi puta maleta (mi) y me dice que no tengo las llaves de mi (mi) piso. Mierda. ¿18 putos años y medio? Las llaves las tienes tú. Encuentro mi teléfono pero en vez de ver la hora y un mensaje tuyo, el puto teléfono me pide el “puk”. Pero qué coño es el “código Puk”, joder? Así que ni siquiera puedo llamarte para avisarte de que en media hora voy a picar el timbre de tu casa. Y claro, no eres adivina, así que cuando oyes el timbre por cuarta vez te levantas de la cama, te pones ese abrigo que grita tu desnudez y abres la puerta, probablemente pensando que quien pica es el puto cartero, o tu compañero de piso, o el portero… cualquiera menos yo.

Abres y me quiero morir. Te veo desnuda con tu abrigo y me quiero morir. Tardo tres segundos en darme cuenta de que nunca duermes desnuda, de que ni siquiera conmigo dejas fluir tu oxitocina. Tardo tres segundos en salir de mí mismo y ver la escena desde fuera, ese puto cuadro dantesco en el cual he entrado sin proponérmelo. Porque en la puta vida nadie, y menos un teléfono, me había pedido el código puk.
Cuando te pregunto quién es, lo último que quiero escuchar es ese puto nombre. De echo ni siquiera sabía cómo se llamaba. Pero cuando lo has pronunciado, en ese puto momento, 6 segundos más tarde de ese otro momento en que me has abierto la puerta, 12 segundos más tarde de ese otro momento en que has apartado tu nórdico (tu) y te has levantado de tu (tu) cama, desnuda… en ese preciso puto momento ha sido cuando el mundo, o al menos Madrid, se ha puesto boca abajo.

Quiero volver a subirme en un coche contigo e ir a cualquier parte. Pero dime, ahora que mi (mi) mundo está boca abajo, ahora que el suelo está sobre mi cabeza, cómo coño vas a conducir?

domingo, 24 de enero de 2010

Uno de los Grandes, joder.

"Peleando a la contra

En un artículo sobre Luis Cernuda, el poeta granadino Luis García Montero venía a decir que en un mundo en el que todo es fácilmente homologable, incluso las personas somos susceptibles de ser carne de hipermercado, así que es muy importante que predomine la conciencia individual sobre el pensamiento globalizador. En estos días, tratar de seguir tu propio camino, de ser coherente con tus convicciones, se convierte precisamente en la única manera de actuar en el mundo en un sentido global. Yo siempre he encontrado respuestas en poetas como García Montero. Creo en él.

Al comenzar a escribir este escrito me preguntaba cómo había llegado hasta éste punto y el origen y el fondo lo he encontrado en ese artículo que leí en Cadaqués en septiembre, después de grabar Pájaros mojados.

La música está perjudicada por el sistema. Hemos llegado a una situación en la que la falta de respeto, la comercialización salvaje y la falta de escrúpulos hacen difícil encontrar algo de verdad en el panorama. Hoy sería muy difícil para mi hallar los referentes artísticos que me hicieron agarrarme al sueño de ser músico. Nunca entendí la música como una competición. Ahora tenemos una generación entera que ha concebido la música como una carrera de caballos. Así es imposible construir nada. Ya está podrido de raíz.

Yo quise ser músico porque me volvían loco las canciones que escuchaba cuando me empezaron a gustar las que escribía me puse a tocar sólo en bares. Ocho años después me he encontrado con la esencia de mi oficio al volver a hacerlo. Por primera vez siento que me gano la vida dignamente como músico. Llevo tres meses en la carretera, viajo con mi teclado y mi guitarra. Nunca había aprendido tanto. He tenido mucho tiempo para pensar, y después de abandonar mi compañía de discos por voluntad propia, repaso mi experiencia en la industria y desde que grabé mi primer disco, Personal, en el 98, he pasado por ser una promesa, un desecho, un retorno esperanzador y una tercera oportunidad.

Desde el principio intenté ganarme el respeto y soy de los que puede decir que ha grabado siempre las canciones que ha querido, con la gente que yo he elegido para trabajar. Estaría bueno. En el primero se pasaron para decir que íbamos a vender 400.000 copias (vendimos cinco mil), el segundo lo grabamos en una habitación de 4m2 en casa de Carlos Raya. Se lo dimos hecho. En el tercero el director artístico de la compañía sólo dejó dos botellas de champán en el congelador. Todos los gastos de grabación corrieron a cuenta de mis royalties, es decir yo pagué por un disco que como los otros ahora es propiedad de gente que ni siquiera conozco. ¿Alguien estaría dispuesto a pagar por algo que nunca va a ser suyo?. Nuevos contratos creativos. Es verdad que pude no haber firmado ese contrato, pero ya estábamos a mitad de la grabación y quise mantener los compromisos con mi equipo y el concepto inicial del disco. Se puede comprobar.

Con mi anterior compañía las he visto de todos los colores. Han llegado a regalar mis discos sin darse cuenta. He sentido que me sacaban la navaja al señalarme con el dedo una cláusula del contrato. Siempre he trabajado para ellos con dignidad y profesionalidad. He sido exigente pero no me considero un tipo conflictivo. Y me tomo mi trabajo muy en serio. No quiero estar a hostias todo el día con una compañía, pero si ves que te la están colando siempre, se te hace muy difícil estar centrado en lo único realmente importante. Yo quiero hacer canciones sin pensar en singles, marketing ni playbacks chungos en Música sí, donde por cierto no me dejaron tocar en directo, así que deberían llamarlo Música no.

No quiero participar de esto. No creo que tenga nada que ver conmigo. No quiero salir en esa foto. Ante la posibilidad de firmar por otra compañía me vería en la obligación de renunciar a mi libertad. Y yo quiero que mi libertad sea el motor principal de actuación en mis próximos proyectos. No estoy resentido con la industria, simplemente no me veo dentro en esas condiciones. Esto es lo que pienso y solo puedo defender mi postura desde la independencia. Así lo siento ahora y debo ser coherente. Si volviera a firmar con una multinacional estaría aceptando una serie de condiciones que en algunos puntos me parecen indignas y en otros directamente esclavistas.

En conclusión, voy a intentar editar mis propios discos, sin grandes pretensiones, con el espíritu de un artesano que pule sus propias piezas y las vende en su pequeña tienda. Algo sencillo. Mi equipo está conmigo, aunque me avisen del golpe que me van a dar. No pienso en las consecuencias, no escucho a los que me dicen que no es lo más inteligente. Para mi lo más inteligente es hacer lo más coherente. No me importa que me veten, que me nieguen ciertos medios, porque no me da ningún miedo acabar tocando en el metro o en la calle, siempre habrá alguien que quiera escuchar una canción, o no?. Nos educaron con la idea equivocada de relacionar músico con millonario, si no vendes mucho, o si no te venden mucho, sobrevuela la idea del fracaso. No hay que llegar a ningún sitio. Para mi el único fracaso sería hacer una puta mierda de disco.

A partir de ahora algunas cosas van a ser más difíciles, ni soy empresario ni quise serlo nunca. No pienso en grandes objetivos. Voy a necesitar mucha ayuda para sacar adelante este nuevo proyecto. Usaremos la imaginación. Nuevas vías para autogestionarnos y grabar música con calidad y sin interferencias. Desde la página web informaremos y pondremos música para que todo el que quiera pueda acceder a nuestra música. Abriremos un número de cuenta para que de manera voluntaria la gente que lo considere oportuno nos ayude al mantenimiento de la página, grabaciones, celebración de conciertos, proceso de creación, etc…

Paralelamente, y a partir de mañana mismo empezaremos a grabar el que será nuestro cuarto disco, que esperamos esté listo el próximo mayo. La idea inicial es grabar en un formato básico, sencillo, acústico, con canciones sostenidas con voz y/o guitarra acústica, con la intención de llevar ésta gira al estudio de grabación. Tal vez haya tomas de directo de éstos conciertos de Peleando a la contra. Seguiré tocando hasta final de junio y después de presentar el disco, he sido invitado a unirme a la gira del gran Joaquín Sabina abriendo sus conciertos en éste mismo formato acústico. Todos entenderéis la emoción que supone esto para mi. Supone un regalo y un premio para todos los que me habéis apoyado de una manera u otra estos últimos cinco años.

No se si era necesaria o no esta especie de declaración de intenciones y principios, yo lo he hecho por respeto a la gente que como dice Tom Petty, todavía le importa un poco más la música que el dinero.

A partir de hoy estamos en otro sitio. Será más complicado venir a vernos, encontrarnos, pero te aseguro que vamos a seguir escribiendo, grabando y tocando canciones. Navega por internet, echa un vistazo a la guía de conciertos de tu ciudad, sal a la calle. Ahí seguiremos. Peleando a la contra.

Quique González."

jueves, 21 de enero de 2010

Tengo que ser sincero; lo siento. Tengo que ser sincero, por mucho que nos duela. Por mucho que me duela. Por mucho que me arda, tengo que ser sincero; no vaya a ser que te caigas y piques en mi puerta. Tengo que ser sincero.

Te mentí.

No vuelvas.

miércoles, 20 de enero de 2010

20 de enero del 2010 en Madrid.

Ha pasado el tiempo y ni me he enterado.
Me lanzan flechas y tampoco me entero. Me rebotan. Llevo un escudo antiCupido. A lo mejor me lo puso alguien una noche mientras dormía, porque no recuerdo habérmelo puesto yo.
Aunque cada vez estoy más convencido de que es verdad, de que nadie es imprescindible.

Y sigue pasando el tiempo, y me meto en coches para practicar onanismos compartidos, o compongo otra canción que probablemente no grabaré nunca. Escucho gritos de auxilio… pero me rebotan. No lo hago a propósito, joder; pero tampoco puedo evitarlo.

“No supimos interpretar el rosa de la luna, que anunciaba sin titubear que algo horrible iba a pasar”

Voy a crear mi propio abecedario.

domingo, 17 de enero de 2010

Necesito ensayar para esta noche, pero soy incapaz.

Matxitxako es la mejor canción que he escuchado en mucho tiempo, y cuando encuentro algo así, algo que me sacude tan adentro, me vuelvo zombie y esclavo. Ya no soy el mismo que hace dos horas, y nunca lo seré. Ese es uno de los sentidos que tiene vivir de esta manera, sintiendo así; y estoy hablando de ellos; de Tulsa; no estoy hablando de mí.

La segunda catástrofe temporal de hoy ha sido tener en mis manos (por fin) Trópico de Capricornio. A la mierda todo. Es lo único que voy a hacer en los próximos días. Voy a fundirme con Miller.

Y que Dios me pille confesado.

PD: lo que pasó ayer en Callao fue muy muy muy fuerte. Mientras tocábamos sentí como se abrían puertas lejanas… sentí vuestra energía, cabrones. Creo que nunca me había sentido así. GRACIAS

... y hoy...

sábado, 16 de enero de 2010

16 de Enero del 2010

Salgo. Bebo. Salgo. Bebo. Negocio mi puto futuro. Salgo. Acústico en Cadena Ser. Sufro otra resaca. Bebo. Pruebo sonido en el puto Fnac. Bebo. Toco, canto, bailo, canto y rompo otra pandereta. Bebo. Tengo una “conversación interesante” y sigo bebiendo. Bebo. Conozco a una camarera y duermo con ella. Dormir me aburre. Dormir me aburre, joder!!! Dormir me aburre.

Y después escucho a Calamaro. Siempre escucho a el puto Calamaro.

miércoles, 13 de enero de 2010

Emoción

Hace unos días fui a ver Bodas de Sangre de Lorca en el Teatro María Guerrero. Cuando acabó la obra, mientras los actores saludaban al público y se despedían, me impactó ver que todos estaban llorando. Una amiga conocía a una de las actrices, y hablando con ella más tarde le preguntó si les había pasado algo, si se había muerto alguien ese día... estaban llorando de emoción. Después de representar la misma obra cientos de veces, al terminar cada pase no pueden aguantarse las lágrimas.

Eso es pasión.

Otra cosa no, pero pasión tengo a raudales; la llevo en mí, invadiendo mis arterias, y no puedo hacer nada para acabar con ella.

Eso es lo que me salva. Por eso estoy aquí.

el planeta sigue girando... pase lo que pase.

Jueves: Costello. (Mad)

Sábado: Fnac Callao. (Mad)

Domingo: Picnic. (Mad)

Martes 26: Barcelona 8 (Mad)

Sábado 30: Fnac Triangle (bcn)

Viernes 5: Torrijos (Toledo)

Sábado 13 feb: Sidecar (Bcn)

Sábado 27 feb: Eléctric (Bcn)

Marzo/Abril: Albacete, Almería, Granada, Madrid, Barcelona, León, Valladolid, Londres, Dublín, Bristol, Murcia y Salamanca; más o menos en ese orden. Iré confirmando fechas en breve.

Ayer en Radio 3, con Santi Alcanda, volví a recordar el poder y la magia que envuelve a la música. Conocer a un Grande como él me ha renovado. La pasión es una realidad. No la despreciemos mezclándola con intereses ni con mentiras.

jueves, 7 de enero de 2010

Sergio

Ayer desperté desnudo sobre una cama de carbón, en una habitación oscura con vistas a la mina. El carbón duele; y quema.
Cuando los pilares que te sostienen se derrumban, ya no puedes vorlver a caer. Aunque el dolor está en las nubes, en la luna, amenazando desde arriba. No puedes huir. El dolor está en el Ave; en Atocha sin compañía.

Pienso en Oliveira y en la Maga; pienso en todo lo que no se escribió sobre ellos; Pienso en como él le acariciaba el pelo mientras los demás hablaban de soledad, en los juegos de cartas con finales sin ropa; en los viajes que habrían hecho junos si a Rocamadour no le hubieran ganado la partida los fantasmas. ¡Pobrecito! ¡pero cómo iba a ganar si tan solo era un crío! no le dejaron crecer, y no pudo defenderse.

Hoy la realidad es una pesadilla, pero como tal, solo dura un instante. Después te despiertas, sudando. Quizás estés desnudo en una cama de carbón, pero sabes que solo es un paréntesis; una calada tóxica; un trago desagradable. Cuando el carbón se consume en llamas ya no puede volver a arder, y ya no queda carbón, ni pesadillas. Entonces todo está limpio.

En mi libro, Rocamadour gana la partida.

No me preguntéis por qué, pero sé que Oliveria y la Maga, junto a Rocamadour, habrían ido a Cuenca. Estoy seguro.

No sé en el vuestro, pero en mi libro el capítulo 7 está repetido. Y no; no es ningún error de imprenta.

sábado, 2 de enero de 2010

PD:

Hoy a las 10 de la mañana, mientras buscaba algún sitio por Malasaña para tomarme un café, me he dado cuenta de que mirase donde mirase solo veía viejos. En las tiendas, cruzando las calles, en los bares.. las mañanas son suyas! No lo olviden.
Los amo a todos; en especial a los que van con bastón.
El próximo día que me levante a esas horas, prometo hacerle una foto a alguno y os lo enseño.

Año Nuevo con tallarines.

Soy un tío bastante asocial aunque a veces no lo parezca. Intento no estar nunca en cualquier tipo de reunión donde haya más de 4 o 5 personas. Es cierto que si no puedo evitarlas, una vez estoy ahí tampoco me siento incómodo. Me he dado cuenta de que en las “fechas señaladas” este instinto onanista se me estimula. Este año decidí pasar la puta Noche Vieja solo paseando por Madrid. Me crucé media ciudad a eso de las 23h para ir a un concierto de blues, pero cuando llegué al garito estaba cerrado. En la puerta había un letrero en el que anunciaban la actuación para ese día a esa hora, pero el puto bar estaba cerrado, así que de vuelta al barrio me metí unos minutos antes de las 12 en un restaurante chino; “voy a celebrar las campanadas rodeado de chinos” pensé, y así lo hice. Al principio me asusté, porque ver a 40 chinos mirándome con cara rara no es moco de pavo, pero luego me convertí en chino yo también y me aceptaron como uno más de su familia. No paraban de hablar en chino, supongo que acordando un día para invadirnos, o sobre por qué coño me había metido ahí, solo, y no paraba de reírme. Cuando sonó la última campanada, un par de ellos vinieron a abrazarme e incluso me invitaron a una copa de cava. Llevo bastante bien la soledad cuando soy yo que la elijo. Había quedado a la una, así que me quedé una hora más en el restaurante viendo TVE1 y me fui, no sin agradecerles su amabilidad y su buen hacer en esa noche tan obligatoriamente especial.

Ayer me aburrí bastante, y hoy al despertarme he decidido que me iba a comprar una cámara de fotos, por tener algo que hacer durante un par de horas. Ahora que ya la tengo me doy cuenta de que en realidad no me hace ninguna ilusión.

Me voy al Retiro.